Buenos domingos.
Estrenamos sección y solo quiero hacer una aclaración al respecto.
Bicheando un poco descubrí que los grimorios en el contexto cultural europeo son manuales donde se recopilan todo tipo de conocimientos, aunque tradicionalmente lo asociamos a magia y brujería, incluyen recetas sanadoras, rituales mágicos, hechizos, descripciones astrológicas, leyendas populares, invocaciones para combatir espíritus malignos etc.
En este grimorio voy a incluir todas esas recetas de brujita sin escoba que a mi me laten más dentro, pero también algunos apuntes sobre uno de mis temas favoritos. El Folklore de los distintos pueblos del mundo.
Esta primera publicación ha venido de la mano de una casualidad muy curiosa, y es que andaba pensando cual de mis recetas asiáticas podían encajar más en esta historia cuando Alfredo trajo a su frutería unas shiitakes del tamaño de mi cabeza y terminé por decantarme por uno de mis platos favoritos entre los amigos, que suelen pedírmelo bastante cuando vienen a cenar. Ahora mismo con todo el tema del corona ya no hacemos quedadas gastronómicas y la vida social se reduce a pasear por el campo, así que he pensado que puede ser un buen momento para que cada uno pueda probarlo en su propia casa y compartir truquis.
En esta primera receta quiero también hablaros sobre un tema que me está flipando: La mitología Japonesa.
Ya llevo unos añetes documentándome tras descubrirlo de rebote por el manga y el anime, en los que siempre suelen aparecer criaturas mágicas del folklore japonés (de la A a la Z)
Es un tema muy extenso y no quiero aburriros, así que voy a enlazar conceptos básicos de la wikipedia y un par de recomendaciones bibliográficas que os pueden gustar.
- Yõkai ( (妖怪 lit. espectro, espíritu, demonio) Seres mitológicos con partes humanas y partes de animal, suelen ser más fuertes que los humanos y un ejemplo famoso sería Inuyasha o Tomoe (babas mil) de Kamisama Hajimemashita o los personajes de Fruit Basket. Nos encantan, es el típico personaje que ayuda a la protagonista shõjo, cuando no su gran amor, queremos tener amigos así, vivir mil aventuras por el bosque y rascarles por detrás de las orejitas, pero en las leyendas antiguas no son seres tan amigables e igual la historia de amor no termina tan bien. Los descendientes de Yõkai (Pronunciado Yukai) con humanos son conocidos como han’yō.
- Yūrei (幽霊 fantasmas japoneses) Fueron humanos en vida pero una muerte traumática, un ritual funerario mal realizado que acabe en pifia (poca broma con las tradiciones japonesas o dar dos vueltas y media en vez de tres en la ceremonia del té) temas pendientes en general o muerte por suicidio puede hacer que el fantasma vague por el mundo atormentando a los familiares o extraños (Aquí el ejemplo que todos tenemos en mente es Sadako Yamamura (山村貞子) conocida mundialmente como la niña del pozo en «The Ring» alimento recurrente para mis parasomnias. En esto también son muy ordenados los nipones, y tienen nombres para cada tipo de fantasma (Onryō, Ubume, Goryō, Funayūrei, Zashiki-warashi …)
- Los oni 鬼? o demonios, muy parecidos a los mitos de diablos y ogros europeos, aparecen en la literatura, arte y teatro japonés y se diferencian de los yõkai en que, hasta donde yo he podido entender, son figuras más monstruosas y sí que se caracterizan por una orientación malévola (Mientras que los yukai tienen una tendencia neutra que a veces puede paracer egoista o pícara pero no tienen por qué ser antagonistas de la historia ni poseer magia que les haga realizar hechizos o posesiones, así abreviando diría que el yukai puede ser Oni pero no tiene por qué…pero no me hagaís mucho caso que todo esto lo he sacado en plan otaku.
25 Grandes libros sobre mitología japonesa (del blog «Tras la última frontera»

El último que me he leído de este tema, un regalo de mi querido Jorge, «En el Japón Fantasmal» (de Lafcadio Hearn)
Y ahora sí que sí. mi receta de pollo teriyaki con shiitakes.
Está la versión elaborada, con el pollo/heura macerado del día anterior en salsa casera, la versión exprés juntando los ingredientes según se hacen en el wok y la versión perruna (mezclar ingredientes con salsa teriyaki de bote y a correr)
Vosotros elegis:
- Pechuga de Pollo o Muslo y contramuslo deshuesado/ heura, seitán o tofu duro en la versión vegana
- Si es pollo importante que sea de buena calidad, pollo ecológico de corral o con dieta de cereales y maiz, aquí sí que se nota la diferencia así que no seáis ratas, prefiero que compréis la salsa teriyaki hecha pero esto no os lo salteís. Para la versión vegana Aldi, Mercadona o La Sirena tienen todo tipo de opciones de proteína para usar, si es tofu mejor del duro porque el blando cuesta un poco manejarlo y acaba desmigado)
- 100 gr de harina (trigo o maicena) para el rebozado
- Setas Shiitake (una bandeja si son setas pequeñas o 4 setas si son grandes)
- Cebolletas de verdeo
- 3/4 dientes de ajo
- Sésamo blanco/negro crudo
- Frutos secos al gusto (Almendras, anacardos, pistachos…)
- Una pizca de sal
- Aceite vegetal suave (girasol, por ejemplo)
- Un vaso de arroz por cada 2 comensales
Para la salsa: (si vamos a macerar el pollo/Heura/ Tofu juntamos los ingredientes en un cazo, primero la soja con la harina en frio y luego el resto, revolviendo hasta su completa disolución, y los calentamos hasta que se fusionen del todo a fuego lento sin que lleguen a hervir o en el microondas medio minuto en potencia baja parando y revolviendo un poco más. Una vez fría la salsa se añade a un táper con el pollo y se deja macerar en la nevera toda la noche, si no da tiempo se pueden agregar por separado los ingredientes de la salsa sobre el pollo a medida que se hace la receta como hago en el vídeo)
Siempre se puede preparar gran cantidad de salsa y conservarla una vez fría en un bote de cristal cerrado herméticamente al baño maría y dejarlo cuando esté abierto en la nevera, que aguanta también bastante tiempo y se puede utilizar para muchos platos o pinchitos al horno, o no complicarse la vida demasiado, ir al super y comprar salsa teriyaki hecha. Es mucho más sencillo y barato pero para mi gusto no está tan buena.
- 4 cucharadas de mirín (Vino de arroz japonés)
- 4 cucharadas de salsa de soja
- Un chorrito de sake (licor de arroz) o licor al gusto
- 4 cucharadas de azúcar morena, panela o de coco o miel.
- Jengibre rallado o en polvo (punto picante fresco opcional)
- Maicena o harina de arroz glutinoso (le aporta cuerpo si os gusta más espesita)

Para decorar (os lo podéis saltar ricamente pero da un punto extra) :
- Gomasio (sesamo negro, blanco, sal marina, algas kombu y wakame trituradas, sirve para ensaladas, platos de arroz y da un toque final, no calentar porque pierde el sabor y la potencia)
- Cilantro (muchas de estas especias que encontráis en el super frescas se conservan muy bien congeladas y si las sacas al empezar a cocinar están listas en el momento de emplatar)
- Cebollino
- Jengibre en polvo/ rallado (también se puede incluir en la salsa si quereís un toque picante y ácido, yo en el vídeo me lo he saltado)

(Opción vegana sustituir pollo por heura/seitán o tofu duro)
¿Cómo lo hacemos?
- Limpiamos bien las shiitakes a golpecitos y las lavamos con cuidado de no mojar el librillo, solo la parte superior para quitar la arena.
- Cortamos las verduritas (ajo, cebollino y shitake) y salteamos en sartén grande o wok con aceite vegetal suave hasta que estén pochadas, agregando agua si es necesario, soja y una pizquita de sal.
- Tostamos almendras y sésamo en el mismo wok (haciendo espacio en centro) o en sartén pequeña a parte con cuidado de que no se quemen
- Cortamos el pollo / Heura o Tofu sin quitar costra o piel y lo enharinamos ligeramente (si queremos sabor más fuerte podemos dejarlo macerando en un táper con los cortes hechos y los ingredientes de la salsa tras mezclarlos en un cazo a fuego lento sin que lleguen a hervir y dejándoles enfriar toda la noche en la nevera,como ya he explicado, en este caso hay que sacarlo un poco antes y ponerlo sobre papel de cocina un rato antes de echar harina para que no se quede muy acuoso.
- Ponemos la proteína (Pollo, heura o lo que useís) boca abajo sobre el wok con cuidado de que no se pegue, por encima añadimos ingredientes de la salsa si no lo hicimos antes y vamos removiendo con cuidado.
- damos la vuelta y tapamos para que se haga, vamos mirando y dándo la vuelta unos minutos hasta que esté hecho.
- Añadimos arroz (cocido en arrocera o en cazo 20 minutos a parte con 1 medida de arroz por cada 2 de agua y un puñadito de sal)
- Decoramos a gusto y ¡ a zampar!

PD: Este primer video lo hemos hecho con mucho amor y cero experiencia.
Cualquier duda que se os plantee en el proceso o variantes para sustituir ingredientes me podéis escribir para resolverla, soy consciente de que se me han olvidado mil cosas.
Para los observadores: la planta muerta que aparece de fondo en la terraza es una maceta de lilium rosa, la conservo porque tengo la esperanza de que reviva en primavera (Teo está convencido de que tengo una habilidad innata para asesinar plantas de interior, yo me consuelo pensando que no se puede ser buena en todo, vuelve, Lily, vuelve)
Nos ha costado mucho mantener el tipo, he empezado dedicando «un salido» al frutero y a partir de ahí ya nos daba la risa boba, así que sed misericordios@s. Desde que aparece la arrocera en escena funcionando hasta que salta y terminamos la receta os lo podéis saltar. Eran las cuatro de la tarde y teníamos hambre lobuno, el vermú también ha hecho lo suyo, pero no es excusa.
Y eso es todo por hoy. gracias por seguir leyendo, por los comentarios y mensajitos. ¡Sois amor!
Tengo en cuenta todas las peticiones de recetas que me habeís mandado estos días y las iremos subiendo a ratos libres, si todavía no habéis pedido la vuestra estáis tardando.
¡Feliz domingo, amig@s!